

En la reciente y tensa sesión del Concejo Deliberante de Quilmes, la aprobación de una nueva tasa sobre la carga de combustible se vio marcada por la ausencia del concejal Fernando Pérez de la Unión Cívica Radical, que hoy cuenta con el respaldo de Martín Lousteau, a través de su amigo y diputado provincial, Pablo Domenichini, haciéndose un hombre de fuerte peso político en el distrito.
La falta de Pérez en un momento crítico, especialmente durante la votación de un aumento de impuestos significativo para los ciudadanos del distrito, revela una vez más la fragilidad y las divisiones internas de la oposición. La fragmentación de la oposición también fue evidente, no solo por la ausencia de Pérez que facilitó aún más aprobación de la tasa, sino por la falta de cohesión y unidad en sus filas.
Este episodio destaca los problemas de conducción dentro de la oposición, que parece incapaz de presentar un frente unido ante propuestas claves impulsadas por el oficialismo.


María Sotolano lanzó su candidatura: “Tengo vocación de ser intendente de Quilmes”

Unión, Renovación y Fe: ¿Un nuevo aliado para Kicillof en la Legislatura?

Repudio: Berrozpe le tapó los carteles a Cristina en medio de la proscripción con el eslogan “Berrozpe es San Juan”
