Bianco, Burtoli y Kolak: un armado que busca disputarle poder a la Cámpora en Quilmes

En el escenario político de Quilmes, donde el peronismo está marcado por la fuerte presencia de La Cámpora bajo el liderazgo de la intendenta Mayra Mendoza, comienza a gestarse un espacio que busca disputarle poder en el distrito. Detrás de esta estrategia emergen tres figuras clave: el ministro de Gobierno bonaerense, Carlos Bianco; el concejal quilmeño, Ariel Burtoli; y el dirigente peronista, Juan Kolak.

Bianco, hombre de extrema confianza de Axel Kicillof y pieza clave en su armado político, viene ganando protagonismo en el conurbano con la intención de consolidar un espacio propio dentro del peronismo bonaerense. Su cercanía con el gobernador y su rol articulador en la provincia lo posicionan como un actor fundamental en la disputa interna del oficialismo.

Por su parte, Ariel Burtoli, concejal de Quilmes y una de las voces del peronismo que no responde a La Cámpora, ha comenzado a fortalecerse en el distrito con el respaldo del intendente de Avellaneda, Jorge Ferraresi, sectores que buscan una alternativa al liderazgo de Mendoza. En tanto, Kolak, referente quilmeño, se suma a este armado con su experiencia territorial y su capacidad de construcción política.

El desafío que enfrentan estos dirigentes no es menor. Quilmes es un bastión de La Cámpora en la provincia de Buenos Aires, y Mayra Mendoza ha logrado consolidar su liderazgo con el respaldo del kirchnerismo. Sin embargo, las tensiones dentro del peronismo y la disputa por la conducción del espacio han abierto una ventana para la aparición de nuevas figuras que buscan posicionarse de cara a los próximos desafíos electorales.

El rol de Bianco dentro de este esquema resulta clave, no solo por su influencia en la gestión provincial, sino también por su proyección política en un escenario donde Kicillof ha comenzado a trazar su propio camino, en ocasiones con matices diferenciados de La Cámpora. En este contexto, el armado que impulsa junto a Burtoli y Kolak podría representar una alternativa dentro del peronismo local, con el objetivo de disputar espacios y equilibrar la balanza del poder en Quilmes.